Estructura y partes de un logotipo

Todos los días y a cada instante vemos logotipos por todos lados en televisión, marquesinas, internet, prensa e incluso en redes sociales.

Para las personas que los ven es algo muy común y seguramente pensarán que es fácil de hacer pero cuando te ves en el pellejo de tener que hacer uno o pensarlo al menos, lo primero que tienes que mirar es la estructura hay que seguir para hacer un logotipo.

A continuación vamos a ver que crear un logotipo no es tan sencillo como parece, tiene una estructura y partes bastante amplias que debes conocer antes de empezar a crear.

Aclaración del término logotipo

Es un símbolo con imágenes o, incluso, sólo con letras que identifican la identidad de una marca, lo que se conoce también como branding de marca.

El objetivo de tener o crear un logotipo es para que los clientes, a través de éste, asocien los productos o servicios de la marca a la empresa con la visualización del logo. Con esto las empresas consiguen hacerse hueco en la mente del consumidor a través de este símbolo y así poder fidelizar a clientes.

El logotipo debe ser sencillo, legible, adaptable y original.

El logotipo tiene una estructura con sus partes correspondiente, hablamos de:

- Logotipo: es la tipografía que hacen el nombre principal de la marca, por ello debe ser legible. Ej: Canon o Coca-Cola.

- Imagotipo: es la unión de la tipografía o letra de la marca con algún dibujo o símbolo, es decir, está formada por texto e imagen. Está compuesto por una parte legible y otra visual. Es la unión del logotipo con el isotipo. Ej.: Adidas o Red Bull.

- Isotipo: es simplemente el dibujo, imagen o figura por la que está representada la marca, sin ningún texto. Debe ser entendible por sí mismo. Ej.: Lay´s o BMW.

- Isologo: se trata del logotipo y el isotipo, los dos en un mismo elemento, cuando los dos elementos son uno y no se pueden separar. Son menos típicos de ver aunque es genial para diferenciarse de la competencia. Ej.: M de McDonald's o la manzana de Apple.

- Strapline: es un texto conciso que sirve para aclarar a qué se dedica la empresa, si el logo no lo deja claro o para añadir un concepto emocional que conecte al consumidor con la marca. Normalmente este pequeño texto aparece debajo del logotipo.

Partes que todo logotipo debe incluir

No todos los logotipos tienen que seguir la misma estructura que hablábamos anteriormente, lo ideal es que se cree un logotipo y un imagotipo, aunque eso debe ir según cada caso. Pero, sobre todo, para que sea un buen logo y enganche al público deberá incluir lo siguiente:

- Color y tipografía: estos dos elementos son los más importantes a destacar, ya que los colores expresan emociones, con lo que crearás un vínculo con tus clientes, y según el tipo de letra que utilices dará más prestigio o más diversión a la marca. El color debe estar relacionado con el branding de la marca, para así situar el logo a la empresa.

- Icono: puede incluir el nombre de la marca pero es esencial su diseño para al visualizarla, poder relacionarla con la marca.

- Nombre: este elemento es primordial, todo logotipo debe tener un nombre con el que se identifique al negocio.

Cómo diseñar un buen logotipo

Para diseñar un buen logotipo y que además tenga un valor añadido se debe realizar dicho logo con aquello relacionado con la empresa a la que le va a dar imagen. Recuerda, no te dejes llevar por la moda, la moda es pasajera, el estilo es eterno, así que marca tu propio estilo. Te ayudamos con las siguientes calificaciones que debes tener en cuenta si quiere destacar:

- Originalidad: sé creativo, quizás tengas que hacer más de uno para llegar al que quieras conseguir pero no tires la toalla, sigue pensando y arriésgate.

- Pregnancia: tiene que ser un diseño y texto fácil de captar, de ahí que tenga que ser simple y equilibrado.

- Enfoque a los consumidores: busca el estilo de vida, económico y preferencias de tus consumidores, así conseguirás que se sientan identificados con el logotipo.

- Claim: en este caso aportamos un eslogan a la marca que represente lo que la empresa quiere transmitir en pocas palabras.

- Legibilidad: que sea claro y no lleve a confusión.

- Reductibilidad: debe tener en cuenta que el logotipo tiene que poder leerse bien, aunque sea en formato pequeño, nunca sabes donde lo puedes encontrar.

- No ser redundante: no utilice imágenes si no van a aportar nada más de información útil. No traten a vuestro buyer persona como si fueran “tontos”.

Recuerde que el principal objetivo de diseñar el logo de una empresa es la de llamar la atención de los consumidores potenciales e intentar conseguir que lo retenga en su mente, algo que es un poco más difícil pero no imposible, con solo ver el logo y así poder relacionarlo con la empresa.