Qué diferencia un accidente de trabajo de una enfermedad profesional

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Qué diferencia un accidente de trabajo de una enfermedad profesional

Tanto los trabajadores y empleados de una empresa como quienes se dedican al ámbito laboral, como los profesionales de riesgos laborales o recursos humanos, se topan en algún momento con la necesidad de diferenciar entre un accidente de trabajo y una enfermedad profesional.

A pesar de ser 2 conceptos con elementos comunes, son sumamente distintos, y en este artículo te aportamos todas las claves para identificar perfectamente estas diferencias, así como la normativa que las regula. Presta atención.

Qué es exactamente un accidente laboral o de trabajo

Para entender la principal diferencia entre una accidente de trabajo y una enfermedad laboral, que radica esencialmente en que el accidente se produce en un momento concreto mientras que la enfermedad se va desarrollando poco a poco, se debe conocer cada uno de ambos conceptos en profundidad, así como la legalidad que marca los criterios para su distinción.

El accidente de trabajo, en concreto, engloba aquellas lesiones producidas en el lugar de trabajo de la empresa en el momento del desarrollo de las funciones del puesto en cuestión, así como en el camino de ida o vuelta a dicho espacio laboral.

Pensando en lesiones que puedan darse de esta forma, seguro que vienen a la cabeza posibles caídas, quemaduras o accidentes con maquinaria o herramientas profesionales. Sin embargo, hay más situaciones que se definen como accidente laboral, y que vienen recogidas en el artículo 156 de la Ley General de SS.

Cuándo un accidente se considera accidente laboral

Según el citado artículo de la ley, se reconocen como accidente laboral las lesiones corporales o funcionales derivadas de las siguientes situaciones:

  • Provocadas al ir o volver del centro de trabajo, lo que se conoce como accidente in itinere.
  • Lesiones derivadas de acciones de salvamento en el trabajo.
  • Lesiones derivadas de ejercer un cargo sindical.
  • Accidentes provocados por realizar tareas no contempladas en el grupo profesional al que se pertenece, ya hayan sido encomendadas por un superior o propietario de la empresa o realizadas de forma espontánea.
  • Empeoramiento de una patología previa siempre que este se deba a una de las funciones desarrolladas en el trabajo.

Estos criterios determinan lo que es un accidente de trabajo, diferenciándolo de lo que veremos se reconoce como enfermedad profesional.

Qué no se considera un accidente en el trabajo

Por su parte, la ley también aclara qué circunstancias de un accidente, aunque pueda ocurrir en la jornada o lugar de trabajo de la empresa, no lo vuelven accidente laboral:

  • Aquellos derivados de una fuerza mayor, como la meteorología.
  • Aquellos derivados de una imprudencia del trabajador, para lo cual hay que distinguir entre la imprudencia temeraria, que hace referencia a la ignorancia y falta de cuidado deliberados del trabajador con las normas de seguridad y el riesgo derivado de su incumplimiento, de la imprudencia profesional. Esta última engloba las imprudencias cometidas en el desarrollo normal de la actividad profesional, lo que sí se puede contemplar como accidente de trabajo.

Como se puede observar, un accidente de trabajo está relacionado principalmente con daños y lesiones provocadas a partir de un momento concreto. Teniendo esto claro, pasemos a tratar las enfermedades profesionales.


Qué nos dice la ley sobre lo que es una enfermedad profesional

Si los accidentes laborales los regulaba el artículo 156, las enfermedades profesionales se determinan mediante una serie de criterios recogidos en el siguiente artículo de la Ley de Seguridad Social, el 157.

Este apartado expresa que las enfermedades profesionales son aquellas que vienen provocadas de manera gradual como consecuencia del trabajo, por contacto con determinadas sustancias en el desarrollo de la actividad profesional, por ejemplo.

Estas enfermedades deben, además, coincidir con lo establecido en el Real Decreto 1299/2006, donde se recoge el cuadro de enfermedades profesionales reconocidas como tal, así como el protocolo de notificación y registro de las mismas. De no estar recogidas aquí, patologías derivadas del desarrollo de la actividad profesional pueden considerarse accidente laboral.

Clasificación de las enfermedades profesionales

El artículo 157 distingue 6 grupos de enfermedades profesionales:

  1. Causadas por elementos químicos
  2. Causadas por agentes físicos
  3. Provocadas por agentes biológicos
  4. Provocadas por agentes cancerígenos
  5. Derivadas de la inhalación de sustancias y elementos no comprendidos en el resto de grupos
  6. Cutáneas por sustancias y agentes no representados en el resto de grupos

En esta clasificación, encontramos 2 de los criterios que permiten definir una enfermedad profesional, a saber, su grupo y agente, la sustancia que la causa. Pero no son los únicos.

Criterios para determinar una enfermedad profesional

Una enfermedad profesional viene determinada por 4 criterios:

  1. Los grupos de agentes que se acaban de exponer, y que incluyen la distinción entre tipos de sustancias que comparten una cierta naturaleza (física, química, etc.).
  2. Agente: Dentro de cada grupo, el agente concreto que provoca la enfermedad, como puede ser el asbesto en los cancerígenos, o un tipo de movimiento en los físicos.
  3. Subagente: Dentro de los agentes, algunos engloban varios elementos y se dividen en subgrupos para identificarlos de manera individualizada, como ocurre con el grupo de los metales, por ejemplo.
  4. Actividad: Desempeño profesional asociado al trabajo con un cierto agente, como ocurría con el amianto y ciertas actividades de construcción.

Por tanto, ante una enfermedad que cumple los criterios, si ésta está recogida en la lista del RD mencionado, se considerará enfermedad profesional.


Por qué cuesta diferenciar los accidentes de trabajo de las enfermedades profesionales

Ahora que se ha expuesto la diferencia entre lo que es una enfermedad profesional y accidente laboral, puede parecer que son situaciones bien distintas. Sin embargo, no siempre es fácil identificar ante qué nos encontramos, además de que ambas tesituras comparten otros elementos comunes, como similitudes en las consecuencias que acarrean para empresa y trabajadores.

  • En ambos casos el trabajador disfrutará de una baja laboral (incapacidad temporal) durante un máximo de 1 año prorrogable, y tendrá derecho a ser indemnizado. La indemnización se decidirá en función de la incapacidad recibida, las obligaciones extracontractuales de la empresa, así como de la presencia de lesiones permanentes, aunque no sean invalidantes.
  • En caso de enfermedades o lesiones cuyo periodo de convalecencia es indeterminado o a largo plazo, se puede solicitar una incapacidad permanente parcial o total, según el grado de afectación al desempeño de las funciones.

Estas incapacidades se concederán o no en función de la valoración de cada situación concreta, teniendo en cuenta el alcance de las lesiones o la enfermedad así como su momento de aparición, por ejemplo.

Cuál es la diferencia esencial entre enfermedad profesional y accidente laboral

Como acabamos de ver, tanto el accidente laboral como la enfermedad profesional vienen derivados del desarrollo del puesto de trabajo, si bien la diferencia clave entre ambos es la latencia. Con latencia nos referimos a que el accidente deriva de un momento concreto y puntual, mientras que la enfermedad profesional es una patología que se va desarrollando poco a poco como consecuencia del desarrollo de la actividad laboral.

Para entender mejor esta diferencia entre accidente y enfermedad, veámoslo de este modo:

  • Un accidente laboral provoca una lesión derivada de una acción concreta en el desarrollo del trabajo y como consecuencia de la realización de las funciones asociadas al mismo. Suele ser de carácter violento y, por tanto, la lesión se provoca de manera inmediata.
  • Una enfermedad profesional se contrae o agrava por el desempeño de un trabajo o el medio del mismo, suele desembocar en una patología duradera por agentes que, poco a poco, van dando lugar a síntomas y el cuadro propio de cada enfermedad.

Una vez aclarada la diferencia esencial, lo importante es saber que la prevención en materia de riesgos laborales es la clave para prevenir estas situaciones. En Anuario Guía puedes encontrar empresas de prevención de riesgos laborales para asegurarte de que tu centro de trabajo cumple con todas las medidas de seguridad necesarias, así como con asesorías en caso de que necesites asistencia, como empresa o trabajador, para la resolución de asuntos de índole laboral.


¿Cuáles son los accidentes de trabajo más frecuentes?

Dentro de los accidentes laborales que se pueden dar, los más comunes son los provocados por golpes con maquinaria o mobiliario, cortes en el uso de herramientas de trabajo y pinchazos.

¿Cuáles son las enfermedades profesionales más frecuentes?

Debido al gran número de puestos de trabajo en los que pueden aparecer, algunas de las enfermedades profesionales más comunes son el estrés, la fatiga ocular y ciertos problemas de espalda.